ÍCARO Y DÉDALO
Dédalo le recuerda a su hijo que no vuele muy alto, pero este no le hace caso y la miel de abeja se empieza a derretir hasta que cae al mar, y allí muere.
Aquí se ve la estatua que construyeron, recreando la muerte de Ícaro, ya caído del cielo, y Dédalo lamentando el accidente.
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